sábado, 11 de diciembre de 2010

Contra el viento


"Contra el viento" es el título de la novela ganadora del Premio Planeta 2009, de la autora española Ángeles Caso.

Hace un mes la compré en una librería casi por no dejar pues tenía otras novelas pendientes. Además, leía "Crónica del pájaro que da cuerda al mundo", novela de 903 páginas, del escritor japonés Haruki Murakami. Antes de terminar de leer ésta, comencé a leer Contra el viento. Inicialmente me sentí algo decepcionada pues, me parecía una historia trillada, no por ello, triste donde se narraba la historia de una niña africana, abandonada por su madre en un ambiente de pobreza extrema. Pero, ésta niña, Sao, no era una niña común. Era inteligente, vivaz, con inmensos deseos de estudiar -quería ser médico- para ayudar a los más necesitados. Sao lucha por alcanzar ese deseo pero el medio, la pobreza, se alza como un fantasma invencible sobre ella, señalándole un destino similar al de las niñas y mujeres vecinas, es decir, no estudiar, trabajar como sirvientas, conseguir un hombre, tener una chorrera de hijos. Sao, luego de despertar del sueño que aspiraba, comienza efectivamente a transitar por el camino predestinado, no obstante, durante su vida, se halla con otras mujeres que aprecian su valor, su determinación para hacerle frente a la vida.

La novela está ambientada en Cabo Verde, estado insular de África, cuya capital es Praia. Cabo Verde fue una antigua colonia portuguesa y se independizó en 1.975. Otros países incluyeron a Portugal y a España. Sao logra ir a Portugal, consigue trabajos temporales, mal remunerados que apenas le permiten subsistir. Conoce a un hombre llamado Bigador (ella siempre había sido muy precavida en cuestiones amorosas) pero se enamora, se hace muchas ilusiones con éste hombre que parece ser bueno (como hubiera dicho mi abuela materna "lo que no sabemos es cuán bueno será") y...queda embarazada. Más temprano que tarde, Bigador comienza a mostrar su verdadera personalidad, condimentada por los efectos del alcohol: empieza a ejercer sobre Sao una violencia tanto emocional como física. Sao intenta escapar, huir con su hijo André pero Bigador no estaba dispuesto a que las cosas sucedieran así. Logra engañarla hasta que se lleva a André a Luanda (de donde él era natal). Contra el viento también expone la injusticia social y racial hacia los inmigrantes pues, aunque la justicia portuguesa sentencia que Bigador debe devolverle su hijo a Sao, no mueve ni un dedo para que ello se cumpla. Es Sao quien, con determinación feroz y una voluntad de hierro antisísmica logra recuperar a su hijo.

En sus inicios, la novela relata las consecuencias que tuvo, sobre la vida de la narradora, el hecho de tener un padre déspota y una madre depresiva (en buena medida por el trato que el esposo le daba). Por cierto, es en Contra el viento donde leo, por vez primera una narración literaria que me llegó mucho sobre el sentirse deprimido y sobre la importancia de los Otros para que una persona salga de la misma.

En fin, Contra el viento es una historia sobre la pobreza, sobre la discriminación sexual y racial, sobre la violencia de género, sobre la solidaridad pero, especialmente, sobre el valor y la fuerza de voluntad de una mujer para sobreponerse a las adversidades de la vida.

Caracas, diciembre 11, 2010.

sábado, 25 de septiembre de 2010

El Tedio


Ésta novela de Moravia (1.907- 1.990), del año 1.960, es merecedora de análisis como las anteriores que he leído de él. Se supone que el protagonista principal es Dino, un hombre de treinta y cinco años, proveniente de una familia adinerada (sólo tenía a su madre). Dino quiere dedicarse a la pintura, aunque no se percibe en él un deseo franco y se traslada a un estudio propio. Un día y posterior a un recorrido pictórico al parecer nada de auténtica calidad, Dino se paraliza ante un lienzo blanco que permanecerá intocado durante toda la novela. Se destaca en la novela la relación desdeñosa de Dino con respecto al dinero. Su madre, ya anciana pero en perfectas condiciones de administrar su casa y su dinero trata de atraerlo para que viva con ella y deje la pintura pero él no cede.
Sumergido en el marasmo de no poder pintar, se hace consciente de el tedio (la noia) que lo invade y que define como una incapacidad para relacionarse con las cosas, con los objetos. En el interín, conoce a una joven de diecisiete años llamada Cecilia, la cual era amante de un viejo pintor vecino y que de hecho fallece en la inmediatez de una relación sexual con ella.
Dino y Cecilia comienzan a intimar y paulatinamente, él va cayendo en las redes de ella. Una red invisible que lo va desesperando cada día más pues él siente que, en realidad, no puede poseerla y la personalidad de Cecilia, que da impulso a las actuaciones de Dino, se presta para ello. Me pregunto hasta qué punto no sea Cecilia la verdadera protagonista pues su comportamiento indiferente, inaccesible, promiscuo raya, podríamos decir, en lo patológico. Cecilia parece no querer a nadie, ni siquiera a sus padres. Cecilia, su comportamiento, me hizo recordar las novelas de Kafka por lo que de inexplicable tiene. La relación de ella con las cosas es practicamente inexistente, las cosas son como son y listo. Los sentimientos o segundas explicaciones no tienen cabida. Cecilia no tiene deseo y no me refiero a deseos íntimos pues mantiene relaciones con Dino, con un tal Luciani (muchas veces el mismo día), las mantenía con el viejo pintos sino a deseo auténtico. Cecilia realiza el acto sexual por deseo de otro. En la definición de Dino sobre el tedio quien parece ejemplificarlo mejor es Cecilia y lo que ocurre es que Dino se enamora de ella y es su opción para salir del tedio aunque él no lo vea así, Dino intenta cosificar su relación con Cecilia para poder dejarla (sin sentirse mal por eso, sin necesitarla)y pone en practica miles de posibilidades pero no lo logra. Al final Dino intenta suicidarse pero resulta un intento fallido. Termina reflexionando, en una cama de hospital, en su amor por Cecilia, sabiéndo él que ella estaba con otro.
Por cierto. leyendo un resumen de El Tedio, me sorprende el enfoque del mismo ya que se centra en la personalidad de Dino, obviando la de Cecilia (entiendo que se trata de un resumen). Allí se destaca, entre otras cosas, que Dino ama a Cecilia y no estoy tan clara que eso fuese así (aunque al final opte por esa interpretación, como escribo antes). Creo que se trata de una novela bien susceptible de un análisis psicológico y que el mismo sería bien interesante. Por cierto, me percato ahora que, mañana 26 de septiembre de 2010, se cumplen veinte años del fallecimiento del excelente escritor italiano.

Caracas, 25 de septiembre de 2010.

lunes, 6 de septiembre de 2010

Pérdido el paraíso



Pérdido el paraíso(2006) es la tercera novela que leo de Cees Nooteboom. La misma trae a colación el tema de los ángeles y su relación con las mujeres. La novela exhibe como portada El Angelus de Boticelli. En Pérdido el paraíso, Nooteboom afirma " -Que los ángeles no pertenecen al mundo de los hombres.". Por supuesto que no se trata de un tema común y hasta extraño -diría yo. La novela consta de dos partes, de dos tiempos. En la parte inicial se cuenta la historia de Alma, una joven de buena familia que vivía en Sao Paulo quien, un mal día, se adentró en una favela y fue violada. La razón del por qué Alma fue hasta allá no está muy clara pero al parecer tuvo que ver con un estado emocional que la aquejaba de vez en cuando. Alma tenía una gran amiga, Almut, quien, en un intento por ayudarla a mitigar el dolor del trauma vivido la convida a ir a Australia país al que ambas, desde muy jóvenes, deseaban conocer. No obstante, la estadía en Australia fue decepcionante en cuanto al deseo que tenían de conocer la experiencia de vida de los aborígenes australianos y un lugar llamado Sickness Dreaming Place al cual les dijeron que era imposible ir. Por un tiempo también debieron trabajar para subsistir. Uno de esos trabajos fue en la ciudad de Perth (al suroeste) haciendo el papel de ángeles que no debían hablar ni moverse durante el tiempo que fueran buscadas pues el juego consistía en que las personas interesadas en participar debían buscar a los ángeles, dispersos por varios sitios. El juego se dió dentro del marco de una convención literaria realizada en la ciudad.
En la segunda parte, se narra la historia de un crítico literario, de casi cincuenta años, divorciado, que vivía con una joven bastante más joven que él. Erik Zandog decidió viajar a Viena para hacerse una especie de cura de mente y cuerpo. Realmente allí se va sintiéndo mejor con él mismo y se plantea no regresar a su vida anterior. Estando en ese sitio se encuentra con Alma que trabajaba allí como masajista. Así nos enteramos que Alma (en su papel de ángel) y Erik (participante de la convención literaria) se habían conocido en Perth y que él se había enamorado locamente de ella. Al final él intenta tantear la posibilidad de que se establezca algo entre ellos pero y aunque Alma recuerda perfectamente a Erik, no es su deseo quedarse con él y decide viajar a Moscú. En Perth y como ángel Alma le había dicho una última frase en la fiesta que hubo para celebrar el fin del evento y él no la recordaba. Se trataba de esa frase de Nooteboom, la de que los ángeles no pertenecían al mundo de los hombres. Se entiende que sí al de las mujeres.

Por otra parte, la novela tiene una hermosa entrada con un texto de Benjamín sobre el desastre que causa a la humanidad el progreso, basado en la interpretación que hace el gran filósofo de una pintura de Klee titulada Angelus novus. También incluye unas citas del Paraíso Pérdido de Milton.

Quiero decir que me cuesta entender la relación entre los ángeles y las mujeres que hace Nooteboom, sin embargo, la novela posee una estética muy fina. El hecho que tenga baches en su comprensión, no hace más que estimular en mí su relectura. Estoy segura que las cosas estarán más claras.

Caracas, 6 de septiembre de 2010.

domingo, 22 de agosto de 2010

El lamento de Portnoy


He realizado la lectura de varios libros de Philip Roth, escritor norteamericano de origen judío, ampliamente galardonado. En la edición de El lamento de Portnoy (1.969) que acabo de terminar de leer (Club Bruguera) se menciona que esta "...es, sin duda, su novela más lograda..." Ignoro hasta qué punto ello sea cierto. No obstante, es una novela que, en conjunto, es intensa, irónica, risible por momentos. El narrador que parece ser el protagonista, relata su vida de niño, adolescente y parte de su adultez durante una terapia analítica. Allí expone la gran cantidad de represiones a que fue sometido por sus padres judíos (padres cariñosos muy preocupados por él, siempre creyendo estar haciendo todo por su bien, como la mayoría de los padres). Además viven en un barrio judío. Alex, niño de clara inteligencia, se rebela, cuestiona, no sólo cómo lo tratan sino que también cuestiona su religión judía y la católica severamente a través del mecanismo de la burla. La represión sexual tiene su salida por tres vías, el onanismo despiadado, la imaginación desatada y ya, en su adultez, a través de una vida sexual desenfrenada. Al final conoce a una prostituta con la que se siente feliz pero se trata de una mujer sin ninguna preparación intelectual y él no logra aceptar eso. Después de ese desahogo, de ese auténtico lamento, queda una paradoja, el analista le dice: "Bueno, ahora quizá podamos empezar. ¿Sí?". Y ello es extraño pues, en las páginas anteriores ya Alex le ha expuesto su vida, sus recuerdos, sus traumas. Ya el trabajo psicoanalítico está muy avanzado.

El lamento de Portnoy presenta ciertas contradicciones en cuanto a la novela anterior que leí de Roth, La Conjura contra América pues aunque le temática es distinta, el protagonista muestra más bien una defensa del judaísmo y una especie de lucha por los derechos de los judíos americanos.

En cualquier caso, pienso que El lamento de Portnoy constituye un aprendizaje sobre los efectos que generan la relación de padres e hijos, la diferencia generacional que aumenta cuando los hijos adquieren niveles educativos muy superiores a los de sus progenitores, la transmisión de valores, la adquisición o el rechazo de los mismos por parte de los hijos, las expectativas, el manejo de la vejez, etc.

En cualquier caso, pienso que los que trabajen en el área de la psicología o el psiconálisis, El lamento de Portnoy puede resultarles una novela nutritiva.

22 de agosto de 2010.

sábado, 24 de julio de 2010

La motivación


Acabo de terminar de leer "Vidas vulnerables" (1.999) del escritor chileno Pablo Simonetti. La motivación esencial para comprar y leer este libro fue el comentario, reseñado en su portada,hecho por el también escritor chileno (fallecido) Roberto Bolaño. Bolaño dice: "Hace tiempo que no leía cuentos tan bien narrados". Y, es cierto, Vidas vulnerables contiene doce historias de excelente calidad, tanto, que no pudiera decir, cuál me pareció la mejor.

También ví una entrevista que le hicieran a Simonetti. Un hombre joven, atractivo, sencillo que, refiere sentarse a escribir sin un guión preconcebido y que define a la escritura como una especie de "expresión" del inconsciente del autor llevado al papel y que sólo en un análisis retrospectivo, consciente es que éste mismo pudiera intentar explicar el por qué del tema o los temas, de este u otro personaje, lo que encarnan, etc. Bueno, así lo entendí yo. En cualquier caso, pienso que vale la pena leer a Pablo Simonetti.

23-07-2010.

domingo, 27 de junio de 2010

la segunda de una trilogía


La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina, es el segundo tomo de la trilogía del lamentablemente fallecido escritor sueco Stieg Larsson, quien apenas llegó a ver publicado el primer tomo, acabando de entregar el tercero. La chica que...es continuación de Los hombres que no amaban a las mujeres. El interés que despertó en mí este tomo fue igual o mayor que el primero, no obstante y aunque no podía despegarme de su lectura, pensaba que era excesivamente truculento. Lisbeth Salander, chica antisocial por un trauma que arrastraba desde su infancia, como fue el de sufrir el despego de su padre (un militar ruso adiestrado en espionaje y protegido por el gobierno sueco) y los maltratos continuos que el mismo le aplicaba a la madre (quien comienza a padecer de trastornos mentales a consecuencia de las golpizas del padre), reitera sus excelentes capacidades como investigadora y su amplísimo conocimiento del uso (y mal uso de las computadoras). Ella, después de las peripecias vividas con Mikael Blomkvist durante la investigación de la desaparición de Harriet Vanger, a quien localizan después de 40 años (sus familiares la creían muerta), decide alejarse de Michael de quien se sentía enamorada. Pasa unas vacaciones en una de las islas del Caribe y luego regresa a Suecia. Lisbeth se había aprovechado de sus conocimientos de internet para hacerse con la fortuna del empresario Wennerström. Decide comprar un lujoso apartamento casi anonimamente y vuelve a buscar a Miriam Wu, con la que compartía una relación amorosa y le deja a esta su casa natal. Constata cómo se porta su innombrable administrador Bjurman y, más temprano que tarde se ve inmersa como principal sospechosa en tres asesinatos. Lisbeth se encierra en su apartamento. Se produce un terrible revuelo en los medios de comunicación donde la presentan como una psicópata, como una loca asesina. Durante todo ese tiempo, se niega a entrar en contacto con Mikael quien le escribe por internet diciéndole que él no la considera culpable y que desea ayudarla. Por otra parte, Mikael y su revista Millennium entran en la investigación de los asesinatos, pues uno de ellos se cometió contra un periodista (y su pareja)que trabajaba a destajo para la revista y que estaba por publicar un libro que trataba sobre el tráfico de muchachas en Suecia, procedentes de países de Europa del Este. Al final, Lisbeth logra aclarar las cosas y así sabremos que el autor intelectual de los asesinatos es el propio padre de Lisbeth. Ese padre también desea matarla a ella. También nos enteramos que, hacia los doce años, Lisbeth le prendió fuego a su padre (él cual se salvó de milagro) y que ella había sido encerrada en un psiquiátrico por varios años y sometida a serios maltratos...La policía sueca, encargada de resolver el caso, queda mal parada, siendo Lisbeth y Mikael los que dan los pasos decisivos. En fin, ahora iré por el tercero a ver en qué termina esta historia.

27-6-2010.

jueves, 24 de junio de 2010

Descubrimiento

A A. de P.

Como en muchos casos en los que he sabido de novelas y de escritores, "conocer" a Cees Nooteboom fue una casualidad. Definitivamente una feliz casualidad. El escenario, los libreros ubicados debajo del elevado de la avenida Vollmer. Ojeaba de un lado a otro. Tomo un libro del escritor sudafricano Coetzee, premio Nobel de Literatura 2003, cuyas novelas me han resultado muy enriquecedoras. Esta vez se trataba de una recopilación de crónicas. Debajo del libro de Coetzee estaba El desvío a Santiago cuyo autor era un tal Nooteboom. En su tapa posterior, había varias opiniones sobre el mismo. ¡Otra casualidad! Una de Coetzee alabando el libro de Nooteboom y así fue que adquirí El desvio a Santiago, el cual leí y me permitió "viajar" por España (lugar donde se desarrolla) placenteramente conociendo monasterios, obras de arte, historias de España, etc.

El segundo libro de Nooteboom que cae en mis manos y leo, fue consecuencia directa de la lectura del primero. El día de todas las almas (1.998). Muchas cosas pueden decirse y escribirse sobre ésta novela pero, en última instancia, su sustento es la melancolía, la atracción por el ambiente cotidiano que, por eso mismo, por ser cotidiano, se pasa por alto con harta frecuencia; el fijarse en los seres humanos considerando que hay tanto que ver en ellos que no hay mucho tiempo para hablar (por muy paradójico que suene). Mucho de eso hace Arthur Daane, fotógrafo y cámara a destajo. Daane viaja a Berlín donde tiene auténticos amigos, sin obviar a su amiga Erna, quien había sido gran amiga de su esposa Roelfje, fallecida junto con su hijo Thomas en un accidente de aviación. Mientras viaja por Berlín, Daane no puede dejar de pensar en los efectos del nazismo y los horrores cometidos contra los judíos durante la Segunda Guerra Mundial. No puede dejar de pensar en esa especie de culpa eterna que ve plasmada en el rostro de cada alemán que observa. Daane presencia la caída del Muro de Berlín.
Daane, es un hombre callado, no obstante, mantiene (y muchas veces sólo escucha) conversaciones altamente filosóficas con un amigo pintor, otro filósofo, otra científica. Al final de la novela, conoce a una joven que se halla en Berlín siguiendo un curso de filosófia y haciendo un estudio sobre la reina Urraca (reina de Castilla y León. 1080-1.126). Ella resulta ser de una extraña singularidad. Es la que toma la iniciativa en los pocos encuentros sexuales que tienen pero, al igual que Arthur ella no es muy dada a hablar. Elik Orange (la joven) padeció un trauma infantil, presumimos que se trata de una violación por parte de un hombre que mantenía relaciones con su madre alcohólica. Quien la cría es su abuela. Elik se marcha de Berlín hacia España en un momento en el que Arthur acepta un trabajo temporal fuera de Alemania. Cuando Arthur regresa y se entera de que se ha ido comienza a buscarla hasta enterarse de que Elik se ha ido a España. Él decide ir a buscarla. En España, en un intento de robo, lo agreden salvajemente, Elik se entera por la prensa y lo visita en el hospital, al igual que sus amigos alemanes, pero él se encontraba muy mal y apenas se entera de que ella estuvo allí. Después de su recuperación comienza nuevamente a buscarla...por todo esto, afirmo que El día de todas las almas es una novela de amor y, sin temor a equivocarme diría que es una de las mejores que he leído.
Por cierto, en la página 342 de la edición de bolsillo que leí se halla la explicación de lo que es El día de todas las almas.

Cees Noteboom nació en Holanda el 31 de julio de 1.933. Tiene una buena producción literaria (novelas, poemas) y una, aún más extensa obra periodística. Ha sido muy galardonado. El crítico alemán Marcel Reich Ranicki llegó a expresar "¡que suerte la
de los holandeses de tener un escritor así!"

24 de junio de 2010.

martes, 25 de mayo de 2010

Conexión



Mi gusto por la lectura va más allá de autores conocidos o recomendados. Me ha ocurrido que estando en un librero de viejo o en una librería me he topado con alguno que llame mi atención por razones diversas: título, portada, nombre del autor y, entonces, lo he adquirido con la esperanza de que me guste. También ha habido algo emocional, como una especie de clic, de ligazón sentimental que no podría explicar mejor. En estos días, saliendo a pie de la Universidad Central, atravesé Plaza Venezuela. Había mucho bullicio. No recordaba que para ese día estaban pautadas varias marchas. Una de ellas, la opositora al Gobierno actual, llegaría hasta allí. Así que, durante un rato estuve apreciando el aparataje de los fuertes cordones policiales y la llegada paulatina de los marchantes. Aproveché para comerme unos perros calientes ya que sentí apetito. No había desayunado sino ingerido unas cuantas tazas de café en lo que iba del día. Luego, se me ocurrió entrar en una librería que estaba enfrente aunque sabía que no debía dejarme tentar pues tengo en mi biblioteca muchos libros en espera de ser leídos. No obstante, cedí a la tentación. Al poco tiempo, tenía en mis manos un libro titulado Tierra de silencio cuya autora se llamaba Rachel de Queiróz. Creo que la motivación inicial por éste libro tuvo que ver con el recuerdo que tuve del gran escritor portugués José María EÇa de Queiroz, ¿serían familia?. A su vez, la portada llamó mi atención: de textura suave, exhibía el dibujo de un pequeño árbol sobre un suelo amarillo pajizo y el cielo pintado sutilmente de morado en su parte superior y de un rosado claro en la inferior. Por la portada pudiéramos haber creído que se trataba de un libro para niños. Anduve ojeando un rato más por la librería y, de pronto me percaté que no había soltado Tierra de silencio. También vi uno de André Gide titulado Et nunc manet in te/Corydon, traducido por el escritor peruano Santiago Roncagliolo del que había leído varios libros, entre ellos, uno que trataba sobre la historia de Sendero Luminoso y del innombrable Abimael Guzmán. De Gide había leído una autobiografía y dos novelas. El inmoralista y Los Monederos falsos, así que me dije, "llevaré a Rachel de Queiróz y a Gide". Los supuse, íntimamente, como una buena compañía.

En dos días leí Tierra de silencio, apenas ciento cincuenta páginas. Dos temas básicos se narran allí, el de la pobreza, la miseria y el del amor, en éste caso, frustrado, de los protagonistas principales. A primera vista, se trata de una novela de corte social, de ricos y pobres, de capitalismo y socialismo pero, mientras leía captaba una sutileza en la narración que la hacía totalmente digerible impregnada de una naturaleza literaria poco común en ese tipo de literatura. Reflexioné: la escritora de Tierra de silencio debe ser una auténtica escritora, alguién muy particular y así resultó ser. Rachel de Queiroz, nació en Fortaleza el 17 de noviembre de 1.910 y falleció en Río de Janeiro el 4 de noviembre de 2.003. Reza en una nota bibliográfica que Rachel fue, además, traductora, periodista y dramaturga. Fue la primera mujer en pertenecer a la Academia Brasileña de Las Letras (4-11-1.977) y la primera en ganar el Premio Camôes(1.993). Para muchos la mayor escritora brasileña. Tierra de silencio fue publicada en 1.930 y su título en portugués es O Quinze y parece contener elementos autobiográficos muy vívidos ya que en 1.917 la familia Queiróz escapa de la sequía a Río de Janeiro, después a Bélem de Pará, regresando dos años después a Fortaleza. La obra, así como los premios recibidos por Rachel de Queiróz es bastante extensa.
Ahora pienso que, debe haber algo que lo lleva a uno a escoger un libro en vez de otro, más allá de las primeras razones que menciono antes y que, lo del clic emocional tiene una influencia mayor que hace conexión con nuestro sentir particular, como si en el momento de tener el libro en nuestras manos fluyera un aura (o no fluyera) entre sujeto y texto y, a través de éste último, entre el sujeto lector y el escritor.

Tierra de silencio: todo un acierto para mí. Ahora le toca el turno a Gide.

Et nunc manet in te (Y ahora permanece en ti) se trata de un corto pero profundo relato que hace Gide sobre la relación que mantuvo con su esposa Madeleine Rondeaux con la cual estuvo casado durante cuarenta y tres años hasta la muerte de ella en 1.938. Como él relata en Si la semilla no muere...Madelaine era su prima, dos años mayor que él. Gide se enamoró de ella desde temprana edad, no obstante, se plantea en el relato que el matrimonio nunca se consumó físicamente y que nunca hablaron sobre la homosexualidad de él, ya obvia durante su viaje de luna de miel. En todo caso, ella nunca le reprochó nada pero para Gide, Madeleine era una persona fundamental en su vida aunque la describe como una mujer dura y poco dada a los cambios. Al parecer se trató de un palmario ejemplo de amor sin deseo sexual al menos por parte de Gide.

Corydon, nombre tomado de un pastor de las Bucólicas de Virgilio constituye un conjunto de relatos, expuestos en forma de diálogos, donde se hace una clara defensa de la homosexualidad, donde se plantea que la heterosexualidad no es más que el producto de la educación, de la costumbre. Muchos de los argumentos allí expuestos se basan en las conductas homosexuales de los griegos y de los romanos, como en conocimientos del comportamientos sexual de los animales. Por momentos parece que estuviésemos ante un libro de biología pero Gide logra raspar las asperezas de ciertos argumentos sobre un tema que siempre se ha considerado difícil tanto desde el punto de vista biológico, como del ético y moral. Corydon, considerado por el propio Gide como su mejor libro, fue publicado, inicialmente en forma separada y discreta desde 1.911 hasta 1.920 hasta su edición definitiva en 1.924. Tal discreción estuvo motivada tanto por represiones del propio Gide como por el consejo de sus amigos quienes le advertían sobre las consecuencias personales y sociales que podría ocasionarle Corydon.

Creo que las dos historias de Gide son bien interesantes y que Corydon, en especial, no contiene para nada, razonamientos descabellados o "contra natura", tal vez si "contra las costumbres". La perspectiva de Gide sobre la homosexualidad contiene elementos teóricos y empíricos difíciles de refutar, al menos, desde el punto de vista lógico.

Quiero agregar aquí un comentario sobre Tres Cuentos de Gustave Flaubert, publicado por editorial Espasa (2000). Una de las cosas que he aprendido de la literatura es la de lo falso que es emitir opiniones sobre lo que en verdad se desconoce. ¿Qué decir del excelente escritor francés?. Madame Bovary y Bouvard y Pécuchet han sido las dos novelas que de él he disfrutado. Ah...y se me olvidaba La tentación de San Antonio de la cual y, al parecer, llegó a escribir tres versiones. Por cierto, de éste último escibí unas cuantas notas que no he concluído pues pienso que se impone una relectura. En definitva Flaubert es un escritor profundo y muy completo en la medida que le cuesta dejar cabos sueltos. Tres cuentos tiene 134 páginas. Narra tres historias tituladas: Un corazón sencillo; la leyenda de San Julián El Hospitalario y Herodías. Cuando comencé a leer, experimenté un tedio sutil, no pasó desapercibido para mi, llegando hasta pensar que el libro sería un fastidio. Al fin y al cabo, Flaubert era novelista más que cuentista. Más temprano que tarde pude darme cuenta que Un corazón sencillo era una hermosa historia sobre la vida de una mujer humilde llamada Felicidad, que La leyenda de...era una historia terrible pero contada de tal manera que me hizo sostener el interés hasta el final y para terminar, Flaubert remata con Herodías, la princesa judía que se casó con dos tíos. Primero con Herodes Filipo con la cual tuvo una hija -Salomé- y luego con Herodes Antipas -que desde el punto de vista de lo poco que se sobre escribir cuentos llamó mucho mi atención. El título, el cuento que -durante casi todo su transcurso tiene mas bien como personaje central a Herodes Antipas-. Herodías, si bien su participación es determinante, es mencionada de manera colateral. Finalmente, el cuento relata la muerte, decapitado, de Juan, el Bautista. Concluyo que es un error o al menos una ligereza pensar o expresar que un libro es poco atrayente sin haber hecho cierto recorrido del mismo. Eso es válido para ciertas circunstancias de la vida.

Enero, 2.009.

lunes, 17 de mayo de 2010

Explícita catatonia o La vida continúa



Hace un par de meses, un día como a las cinco de la tarde, fui al parque con mi hijo para dar una vuelta. Ésta acción, en sí, no parecería tener alguna relevancia, sin embargo, dos circunstancias la salvaban de su ausencia de interés. Una era que, ir al parque de Los Caobos, ubicado cerca de mi casa, constituía el hecho que me producía mayor relajación. Es cierto que el parque ha estado imbuido dentro de una remodelación perpetua en los últimos años, en donde ha sido espoleado en cuanto a sus dimensiones. También las aguas verdosas y empozadas constituían un excelente hábitat para los mosquitos con patas blancas o no. Por otra parte, sacar a mi hijo de la casa, específicamente de su cuarto, es una ardua tarea pues, no quiere separarse del televisor desde que se despierta hasta que se duerme. Una vez en el parque, tengo que pensar y ejecutar miles de ideas para mantener su interés: la posibilidad de que hayan huevos de dinosaurios enterrados en las profundidades de la tierra; escuchar sus explicaciones sobre las analogías, diferencias e importancia de los Power Ranger; instarlo a hablar sobre las figuras que puede realizar con legos; su alta capacidad para armar rompecabezas independientemente del grado de dificultad; su gusto por las matemáticas, realizar carreras que me dejan extenuada, etc.

De salida, nos detenemos donde una señora que vende chucherías variadas, dulces criollos, agua y refrescos. Ese día del que les hablo sucedió un hecho curioso: eran ya como las siete y la noche había llegado inexorable al parque, eran pocos los transeúntes y visitantes que iban saliendo, entre ellos, parejitas de enamorados abrazados como si previeran la dificultad de soportar la pronta separación. Nos paramos a comprar una botellita de agua mineral y una malta, lo que ya se había vuelto rutina. La señora, una mujer todavía joven, morena, delgada, de cabello corto y rizado estaba sentada en un taburete. Le dije lo que quería y, para mi sorpresa, la señora ni me miró. Repetí, nuevamente, "una botellita de agua mineral y una malta", por favor. La señora seguía con la vista al frente, creo que sin mirar nada en particular. Me detuve, entonces, ha observarla. Una estatua fue la figura que se me vino a la mente. Rígida. Sus músculos sumergidos dentro de una inmovilidad cadavérica, su pelo leve y dificultosamente bailoteado por una brisa tenue pero refrescante. "Señora, señora" -insistí. Mi hijo dijo en un tono salomónico: "parece que no escucha". Sí hijo, eso pàrece, le respondí. Miré alrededor. Practicamente estábamos sólos y fue cuando el término catatonia se me vino a la cabeza. ¿Esquizofrenia catatónica? (¡qué rimbombante!) o más esperanzadoramente ¿crisis de ausencia?. Nunca, en mis años de estudiante ni de médico había visto un estado catatónico pero supe que sería muy parecido a esto que tenía ante mis ojos. Me preocupó pensar que ésta persona estaba sola e indefensa. Decidí sentarme con mi hijo a unos metros de distancia a ver si llegaba algún pariente o conocido de la señora y pudiera encargarse de la situación. ¿Qué estaría pensando si es que estaba pensando algo? ¿tendría algún dolor que soportaba estoicamente?, ¿estaría angustiada? O, simplemente su mente y cuerpo estarían flotando juntos en otra dimensión?. Surgió de mis recuerdos, una película donde un hombre había sido enterrado vivo, por supuesto creyéndole muerto. El hombre se despertó dentro de un ataúd asignado a destiempo. Le llegó así una muerte prematura bajo el horror de la asfixia.
Se hicieron las 8, las 9 y ya no pude esperar más. Mi hijo quería irse a casa y echamos a andar. Varias veces me volví para mirar y allí seguía la señora en actitud inmodificable. Mi hijo agregó, no sin una especie de fastidio: "parece una momia". Mi hijo era un niño de pocas palabras, no obstante, categórico, preciso.

Dos días después regresé al parque. La señora no estaba sino un hombre joven que por su físico me pareció que podía ser un familiar. Sin preámbulos, le pregunté que dónde estaba la señora que allí atendía. Me respondió, sin sorpresa, que la señora estaba hospitalizada en "El Peñón" (como si yo tuviera que saber qué era El Peñón), sí lo sabía). Pronto la darán de alta -añadió. Le comenté lo que había ocurrido dos días atrás y me respondió que él había llegado como a las diez y que había sido imposible moverla de allí sino en horas de la madrugada. ¿Qué es lo que tiene? -pregunté (yo misma me dí cuenta que no tenía derecho a semejante interrogatorio). Dijo: sí, lo que ocurrió es que dejó de tomar unos medicamentos que le habían recetado. De seguida, el hombre desvió su atención hacia un niño que le pedía un chicle ácido.
Dos semanas después volví al parque. Iba sola pues había sido misión imposible convencer a mi hijo para que me acompañara. Vi a la señora, parecía absolutamente normal, como si no estuviera aquejada de una grave enfermedad que la podía hacer permanecer inmersa en la frialdad, en la oscuridad de un parque para nada exento de peligros. Pensé que la vida continua como sea.

Agosto, 2006.

jueves, 13 de mayo de 2010

El autor que no supo de su premio


En 1.972, la novela La cárcel, del escritor colombiano Jesús Zárate obtuvo el Premio Planeta. Se trataba de su segunda novela. Trata, obviamente, sobre la vida en una cárcel. Cuatro (cinco) hombres que comparten una misma celda en una cárcel colombiana. Todos menos uno habían cometido delitos que justificaban que estuvieran presos. Uno, el protagonista Antón Castán tenía tres años preso sin ni siquiera saber el por qué. Es él quien escribe en forma de diario. Estos hombres tenían la particularidad de compartir un buen nivel intelectual evidenciado a través de múltiples conversaciones sobre la libertad, la cárcel, la política, la guerrilla, sobre la muerte y los muertos, sobre los distintos géneros literarios y escritores. Durante un motín que se genera en la cárcel por la detención de un grupo de campesinos, los presos toman la cárcel por varios días para luego pedir negociar con el militar recientemente nombrado director y que tenía fama de asesino y de apellido Leloya y que amenazaba con endurecer más las rudas condiciones carcelarias. Leloya accede a conversar sólo con el líder de los presos y resulta que Antón Castán lo mata a golpes con una pierna protésica perteneciente a un preso llamado Óscar. Al final sabremos que Antón Castán está preso para cubrir un asesinato cometido por Leyola quien simplemente mandó a sus subalternos a buscar "a un culpable". La novela exhibe múltiples diálogos que se enmarcan dentro de lo filosófico y que le confieren una excelente calidad. Una paradoja: Antón Castán es puesto en libertad -aunque sus mismos compañeros de celda lo "juzgan" y lo "sentencian simbólicamente" (hallándolo culpable pues todos sabían que había matado a Leloya). Es decir que, estaba preso siendo inocente y luego cuando ya no lo es, cuando ha matado, lo liberan.

Jesús Zárate, fallecido en 1.967 en Bogotá, dejó una excelente novela. Por otra parte, hizo sentar un precedente en el Premio Planeta pues fueron sus hijos quienes enviaron la novela al concurso y, para sorpresa del jurado cuando anunciaron al ganador resulta que éste ya tenía 5 años de haber fallecido. Por ello, se acordó que el Premio Planeta sólo sería concedido a escritores vivos.

lunes, 3 de mayo de 2010

La luna se ha puesto


3 de mayo de 2010

La luna se ha puesto (1.942) del escritor norteamericano Jonh Steinbeck. Esta novela corta la hallé -en no muy buen estado- perdida dentro de un montón en un librero de viejo. Afortunadamente no soy alérgica al polvo. La luna se ha puesto fue un disfrute literario y una historia enriquecedora en cuanto a lo que significa la unión de los seres humanos cuando no aceptan un destino y buscan, sin mucho palabreo, salir de la sordidez. La luna se ha puesto está inspirada en las luchas ideológicas y los conflictos armados (la novela se publica en plena Segunda Guerra Mundial). Recrea el tenso ambiente que se vive en un país recién invadido por tropas extranjeras. En una época imprecisa, un país sin localización concreta y un ejército anónimo protagonizan una guerra que bien pudiera situarse en cualquier lugar del mundo.Bajo el manto de una narración sencilla, se nos rebela el drama de unos vencedores que, paulatinamente, saben que están siendo vencidos, que pueden matar pero no imponerse, que se abruman frente a la enconada hostilidad, la fingida sumisión, la solapada resistencia y, por último, la violencia rebeladora de un pueblo que, por encima de todo, se considera independiente. La luna siempre vuelve a salir para los pueblos que resisten.

sábado, 1 de mayo de 2010

La primera de una trilogía


1-5-2010

No sé mucho (en realidad, NADA) de esto de los blogs. Igual seguiré escribiendo. Le toca el turno a Los hombres que no amaban a las mujeres del escritor sueco Stieg Larsson (fallecido, inesperadamente, en 2004). Me lo prestó una hermana, apasionada de la literatura policíaca. Yo no lo soy tanto pero lo leí y me gustó. Bastante ficción como resulta ser la resolución de un caso (supuesto asesinato) después de 40 años por parte de un periodista (Mikael Blomkvist), especializado en el tema financiero, editor de una revista llamada Millennium y quien acababa de ser condenado a tres meses de cárcel y al pago de una fuerte suma de dinero por difamación de un empresario de apellido Wennerströn. A Blomkvist lo contrata un viejo empresario quien sufría la incertidumbre de la desaparición de su sobrina nieta, después de haber dedicado grandes esfuerzos para hallar al responsable de su desaparición (o asesinato). Blomkvist no tenía mayor interés en ese trabajo pero lo aceptó no sólo por razones económicas sino también porque el empresario Vanger le había prometido información crucial sobre Wennerström. Poco a poco, Blomkvist va descubriéndo algunos detalles del hecho ocurrido hace 40 años que lo lleva a tener un auténtico interés. Luego entra en escena una joven, inadaptada social pero muy inteligente y conocedora del área de la informática, tanto de lo legal como de lo ilegal en el manejo de esta tecnología que llegó para quedarse por muchísimo tiempo. Lisbeth Salander, de quien inferimos padeció graves maltratos en su infancia, trabaja en una empresa de seguridad y es solicitada para trabajar con Blomkvist (a quien, por cierto, había investigado previamente) prestándole gran ayuda hasta llegar a salvarle la vida. Al final, descubren que la nieta del empresario no está muerta sino que vivía en Australia, que era viuda, tenía tres hijos y era una empresaria muy destacada en el área de la cría de ovejas. ¿Por qué ella desapareció? Pues para huir del acoso sexual del que era víctima por parte de su padre (a quien ella ahogó en un lago cercano) y de su único hermano, ambos involucrados en horrendos crímenes de corte sexual, religioso y racista. Después de haberse aclarado la desaparición de Harriet Vanger, Blomkvist obtiene importante material sobre Wennerström y logra demostrar que éste era, sencillamente un criminal.

Los hombres que no amaban a las mujeres luce bien estructurada y resalta no sólo por el tema en sí sino por su capacidad por mantener un interés continuo en el lector por saber qué pasará en las páginas siguientes.

Una novela de carácter histórico.


1-5-2010

Hoy he decidido empezar este blog...

Acabo de terminar de leer la novela La conjura contra América (2.004) del escritor norteamericano Philip Roth. Una novela escrita por un escritor consolidado. Narra los episodios de antisemitismo que se vivieron en los EEUU durante la Segunda Guerra Mundial. Tiene elementos ficcionales, los cuales hicieron que en una madrugada de estas me parara a revisar mi pequeño Larousse ilustrado para saber si Charles Lindbergh había sido presidente de los EEUU, cosa que dudaba sobremanera. Efectivamente no lo fue. La novela mezcla historia verdadera, como la renuencia que hubo en los norteamericanos para participar en tal guerra (y la clara posición de Roosevelt de que sí) y una supuesta conjura basada en el rapto y asesinato del primer hijo de Lindbergh. Se dice allí que Lindbergt fue presidente de EEUU como republicano y posterior a los dos primeros mandatos de Roosevelt, mostrando una clara posición en contra de los judíos. Antes de finalizar su período presidencial, Lindberth desapareció en su famoso avión "el Spirit of Saint Louis" el 7 de octubre de 1.942 y más nunca se supo de él. Esa desaparición generó una serie de disturbios y ataques contra judíos. Al final de la novela, se especula que el hijo de Lindberth había sido raptado por los alemanes y que estaba siendo educado por ellos y que Lindberth estaba siendo víctima de un chantaje, al igual que su esposa, para que tuviera y ejerciera esa posición anti judía. Parece que al final Lindberth decide rebelarse contra toda esta situación a pesar de su hijo y es cuando los alemanes "lo desaparecen". ¿Realidad?, ¿Ficción?. En cualquier caso se trata de una novela bien interesante e instructiva.