El
invierno en Lisboa (1987) es la segunda novela del
escritor español Antonio Muñoz Molina (Jaén, 1956). La leo en una edición de
Seix Barral.
Como todas las novelas
que he leído de este autor, esta también me la prestó Amneris Tovar a quien conocí,
casi por casualidad, hace como 5 años y con la cual me une el amor por la
literatura.
Así, he leído Tus pasos en la escalera (2019), Volver a dónde (2021), No te veré morir (2023), La
noche de los tiempos (2009), El dueño
del secreto (1993) y El invierno en
Lisboa de la cual les comento ahora.
Cuando Amneris me
prestó esta novela, me dijo “esta novela no me gustó nada”. No obstante, me
dispuse a leerla con la mente bien abierta y paso a paso.
El
invierno en Lisboa es una novela extraña. Extraña
significa que su trama no resulta muy clara, hay una mezcla de tiempos (presente y pasado) entre la mayoría de los
protagonistas.
Esta novela se
desarrolla entre San Sebastián, ciudad ubicada al noreste de España (costera),
Madrid y Lisboa.
El trasfondo de El invierno en Lisboa es la oscura
historia de amor (o no) entre un pianista llamado Santiago Biralbo y una mujer
llamada Lucrecia quien, al momento de conocer a Santiago, era pareja de un
norteamericano llamado Bruce Malcom dedicado al reportaje sobre obras de arte y
a la venta ilícita de estas mismas.
La atracción entre
Santiago y Lucrecia es muy íntima y muy inmediata pero, al poco tiempo de
conocerse, Lucrecia y Bruce se marchan a Berlín no sólo por asuntos de negocios
de él sino parece que Bruce siente la necesidad urgente de alejar a Lucrecia de
Santiago. Entendemos que Bruce se percata de lo que le sucede a su mujer con
este pianista.
Santiago y Lucrecia
pasan tres años sin verse y comunicándose por cartas hasta que a Santiago no le llegan más cartas. Todos
los amigos de Santiago, el narrador, el dueño del bar Lady Bird (Floro Bloom),
Billy Swann, que era un trompetista negro que tenía un grupo musical del que
formaba parte Santiago (e incluso habían grabado juntos), se dan cuenta que lo
que Santiago siente por Lucrecia es algo que le traza un destino que no luce
nada favorable. Santiago a duras penas
trata de recomponer su vida dando a Lucrecia por perdida.
Pero, por otra parte,
Lucrecia estaba viviendo una vida infernal con Malcom quien la amenazaba
constantemente con una pistola. En la trama también aparecen unos personajes
siniestros, amigos y socios de Malcom, llamados Toussaints Morton y su rubia
secretaria Dafne.
Llega un momento que
Lucrecia logra huir de Berlín y Morton y Dafne la buscan pero no dan con ella.
También buscan a Santiago pensando que están juntos pero no era así. Cuando
Santiago y Lucrecia se reencuentran, en secreto, deciden huir hacia Lisboa, pero Santiago no continúa
pensando que las cosas entre ellos no eran iguales. Aunque el amor sigue.
Lo cierto es que
Lucrecia se va sola a Lisboa. No obstante, Mortom sigue persiguiendo a Biralbo.
Biralbo se entera que Lucrecia se había apoderado de un cuadro del pintor
francés Paul Cézanne (1839 – 1906) pintado en 1906., llamado La montaña Sainte-Victorie.
Lucrecia se hace con un
plano donde quedaba claro dónde estaba el cuadro (en Lisboa). Se lo robó a
Bruce quien, a su vez, se lo había robado a un hombre llamado El Portugués que
fue asesinado por Bruce y Mortom intentando hacer que confesara dónde estaba el
cuadro. Ese asesinato es presenciado por Lucrecia. Después de eso es que
Lucrecia decide huir, hallar el cuadro y venderlo asegurando su futuro
económico.
Cuando ya Biralbo
piensa que más nunca volvería a ver a Lucrecia, viaja a Lisboa después de
recibir un llamado de uno de los músicos de Swann, quien se hallaba muy
enfermo. Biralbo va y encuentra a su amigo muy desmejorado. Biralbo se topa en
un tren de Lisboa con Bruce y Bruce, aunque lo que quiere es matar a Biralbo,
le interesa primero que le diga dónde está Lucrecia y dónde está el cuadro
antes mencionado. Pero Biralbo se entera
de lo del cuadro porque se lo dice Bruce. Biralbo y Bruce pelean y Bruce cae a
los raíles del tren y muere. Para Biralbo es evidente que Lucrecia sigue en
Lisboa y logra dar con ella, no para vivir juntos sino para decirle que huya, que
Morton la hallará y la matará.
Biralbo es buscado por
la policía ante el hallazgo del cuerpo de Bruce y debe huir de Lisboa. Para
ello, Lucrecia lo pone en contacto con un falsificador de documentos quien le
hace un pasaporte con un rostro cambiado al igual que con el nombre falso de Giacomo Dolphin. Santiago acepta esa ayuda de
Lucrecia pero no sin exigirle que ella se valla de Lisboa inmediatamente.
Santiago regresa a
Madrid, sigue tocando y más nunca supo nada de Lucrecia aunque él pensaba que
si lo buscaba por su verdadero nombre ella nunca lo encontraría.
Aunque sigo pensando
que se trata de una novela extraña, puedo afirmar que tiene muchas frases
sencillas pero con un franco carácter literario.
La edición que leo de El invierno en Lisboa incluye un epílogo
de Muñoz Molina del año 2014. El autor hace una reflexión sobre esta novela y
señala que no se reconoce en ella. También comenta que la novela fue escrita
sin mayor expectativas editoriales, no obstante, la novela si lo tuvo en su
momento.
Escrito y publicado por
Libia Kancev.
Caracas, 18 de
septiembre de 2024.
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