miércoles, 18 de septiembre de 2024

El invierno en Lisboa





El invierno en Lisboa (1987) es la segunda novela del escritor español Antonio Muñoz Molina (Jaén, 1956). La leo en una edición de Seix Barral.

Como todas las novelas que he leído de este autor, esta también me la prestó Amneris Tovar a quien conocí, casi por casualidad, hace como 5 años y con la cual me une el amor por la literatura.  

Así, he leído Tus pasos en la escalera (2019), Volver a dónde (2021), No te veré morir (2023), La noche de los tiempos (2009), El dueño del secreto (1993) y El invierno en Lisboa de la cual les comento ahora.

Cuando Amneris me prestó esta novela, me dijo “esta novela no me gustó nada”. No obstante, me dispuse a leerla con la mente bien abierta y paso a paso.

El invierno en Lisboa es una novela extraña. Extraña significa que su trama no resulta muy clara, hay una mezcla de tiempos  (presente y pasado) entre la mayoría de los protagonistas.

Esta novela se desarrolla entre San Sebastián, ciudad ubicada al noreste de España (costera), Madrid y Lisboa.

El trasfondo de El invierno en Lisboa es la oscura historia de amor (o no) entre un pianista llamado Santiago Biralbo y una mujer llamada Lucrecia quien, al momento de conocer a Santiago, era pareja de un norteamericano llamado Bruce Malcom dedicado al reportaje sobre obras de arte y a la venta ilícita de estas mismas.

La atracción entre Santiago y Lucrecia es muy íntima y muy inmediata pero, al poco tiempo de conocerse, Lucrecia y Bruce se marchan a Berlín no sólo por asuntos de negocios de él sino parece que Bruce siente la necesidad urgente de alejar a Lucrecia de Santiago. Entendemos que Bruce se percata de lo que le sucede a su mujer con este pianista.

Santiago y Lucrecia pasan tres años sin verse y comunicándose por cartas hasta  que a Santiago no le llegan más cartas. Todos los amigos de Santiago, el narrador, el dueño del bar Lady Bird (Floro Bloom), Billy Swann, que era un trompetista negro que tenía un grupo musical del que formaba parte Santiago (e incluso habían grabado juntos), se dan cuenta que lo que Santiago siente por Lucrecia es algo que le traza un destino que no luce nada favorable. Santiago  a duras penas trata de recomponer su vida dando a Lucrecia por perdida.

Pero, por otra parte, Lucrecia estaba viviendo una vida infernal con Malcom quien la amenazaba constantemente con una pistola. En la trama también aparecen unos personajes siniestros, amigos y socios de Malcom, llamados Toussaints Morton y su rubia secretaria Dafne.

Llega un momento que Lucrecia logra huir de Berlín y Morton y Dafne la buscan pero no dan con ella. También buscan a Santiago pensando que están juntos pero no era así. Cuando Santiago y Lucrecia se reencuentran, en secreto, deciden  huir hacia Lisboa, pero Santiago no continúa pensando que las cosas entre ellos no eran iguales. Aunque el amor sigue.

Lo cierto es que Lucrecia se va sola a Lisboa. No obstante, Mortom sigue persiguiendo a Biralbo. Biralbo se entera que Lucrecia se había apoderado de un cuadro del pintor francés Paul Cézanne (1839 – 1906)  pintado en 1906., llamado La montaña Sainte-Victorie.

Lucrecia se hace con un plano donde quedaba claro dónde estaba el cuadro (en Lisboa). Se lo robó a Bruce quien, a su vez, se lo había robado a un hombre llamado El Portugués que fue asesinado por Bruce y Mortom intentando hacer que confesara dónde estaba el cuadro. Ese asesinato es presenciado por Lucrecia. Después de eso es que Lucrecia decide huir, hallar el cuadro y venderlo asegurando su futuro económico.

Cuando ya Biralbo piensa que más nunca volvería a ver a Lucrecia, viaja a Lisboa después de recibir un llamado de uno de los músicos de Swann, quien se hallaba muy enfermo. Biralbo va y encuentra a su amigo muy desmejorado. Biralbo se topa en un tren de Lisboa con Bruce y Bruce, aunque lo que quiere es matar a Biralbo, le interesa primero que le diga dónde está Lucrecia y dónde está el cuadro antes mencionado.  Pero Biralbo se entera de lo del cuadro porque se lo dice Bruce. Biralbo y Bruce pelean y Bruce cae a los raíles del tren y muere. Para Biralbo es evidente que Lucrecia sigue en Lisboa y logra dar con ella, no para vivir juntos sino para decirle que huya, que Morton la hallará y la matará.

Biralbo es buscado por la policía ante el hallazgo del cuerpo de Bruce y debe huir de Lisboa. Para ello, Lucrecia lo pone en contacto con un falsificador de documentos quien le hace un pasaporte con un rostro cambiado al igual que con el nombre falso de  Giacomo Dolphin. Santiago acepta esa ayuda de Lucrecia pero no sin exigirle que ella se valla de Lisboa inmediatamente.

Santiago regresa a Madrid, sigue tocando y más nunca supo nada de Lucrecia aunque él pensaba que si lo buscaba por su verdadero nombre ella nunca lo encontraría.

Aunque sigo pensando que se trata de una novela extraña, puedo afirmar que tiene muchas frases sencillas pero con un franco carácter literario.

La edición que leo de El invierno en Lisboa incluye un epílogo de Muñoz Molina del año 2014. El autor hace una reflexión sobre esta novela y señala que no se reconoce en ella. También comenta que la novela fue escrita sin mayor expectativas editoriales, no obstante, la novela si lo tuvo en su momento.

 

 

Escrito y publicado por Libia Kancev.

Caracas, 18 de septiembre de 2024.

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