Se trata de la primera
novela de la escritora francesa Marguerite Germaine Marie Donnadieu, mejor conocida como Marguerite Duras (Vietnam, 1914-París, 1996). De esta
autora he leído El amante (1984) y Los Caballitos de Tarquinia (1953).
Leí La Impudicia en febrero de 2008. Realmente no sé por qué la releí.
Vale destacar que el
término impudicia significa falta de decoro o de vergüenza.
La
Impudicia (1943) está ambientada en París y la mayor parte al
sur de Francia. Trata sobre la vida de la familia Grand-Taneran. Dicha familia
está compuesta por la madre, los hijos Jacques, Maud y Henry. Este último es producto
del segundo matrimonio de la Sra. Taneran. La relación entre la madre y el
señor Taneran es muy distante, en especial, porque el señor Taneran disentía
del comportamiento de Jacques Grant (de cuarenta años), el cual vivía una vida
disipada, no trabajaba, estaba ahogado en deudas y vivía del dinero que lograba
sacarle a su madre sobre la que ejercía gran influencia. Pudiéramos decir que
era el preferido de su madre.
En los inicios de la
novela, se cuenta que Jacques había quedado viudo (su mujer, Muriel, había
muerto en un accidente de tránsito pero queda la duda de que se haya suicidio)
y debía pagar un supuesto préstamo que había adquirido con dinero de su mujer.
La familia viaja a una
zona llamada Uderan en la cual tenían una casa y tierras pero, al llegar, se
encuentran con que la casa está en mal estado y son recibidos por la familia Pecresse
de la que eran vecinos. La familia
Pecresse tenía un hijo llamado Jean que estaba soltero pero que tenía
relaciones con una criada y con otra mujer del pueblo.
Muy rápidamente, queda
en evidencia que la señora Pecresse desea que su hijo se case con Maud pero
ella no le presta ninguna atención. Luego aparece un joven llamado Georges
Durieux que se enamora de Maud (y ella de él), sin embargo, Georges era muy inseguro.
Pienso que el tema
central de La Impudicia tiene que ver
con un cierto tipo de relación familiar que se establece donde uno de los
miembros ejerce una influencia central que es dañina pero que, por otra parte,
los mantiene unidos. Maud, de 20 años, logra darse cuenta de lo que ocurre en
su familia, de lo poco firme que es su
madre y de lo abusivo que es su hermano, el cual, mientras están en Uderan,
parece estar envuelto en la muerte de la criada con la que Jean Pecresse tenía
relaciones y, por otra parte, quiere que su hermana se case con Jean por
motivos netamente económicos.
Pero Maud se ha
enamorado y va a casa de Georges, donde están unos días juntos. Más temprano
que tarde, Maud se da cuenta de que está embarazada pero no le dice a Georges. Tanto
la madre de Maud como sus hermanos están muy molestos por la actitud de Maud, aparte
de las habladurías que se desataron por parte de los pobladores de la región.
Al final, los Grand-Taneran venden una parte de sus terrenos a la señora
Pecresse y deciden regresar a París. La madre va a buscar a Maud donde Georges
y él sólo la deja ir. Estando en París, Maud decide regresar con Georges y,
extrañamente, su madre la apoya. Esta ida de Maud es como una especie de
liberación, dejando la idea sobre la importancia de que los hijos deben hacer
su vida, su camino sin que ello signifique que se desliguen de su familia
central.
Al igual que las
novelas que he leído de Duras, La
Impudicia muestra un ritmo un tanto lento, desprovista de mayores emociones
o las mismas resultan ser “planas”. El paisaje, la naturaleza con múltiples
descripciones de la flora y la fauna, también constituye un personaje en esta
novela.
La Impudicia de Marguerite Duras fue publicada por Editores Tusquets.
Barcelona, España. 1995. Traducido por Ana María Moix.
Escrito y publicado por Libia Kancev
Caracas, 25 de mayo de 2023.