jueves, 30 de junio de 2011

El corazón es un cazador solitario



"Se hallaba tan vacía que no podía sentir ni pensar en nada"
"...una libertad real y grande, cuyo logro sólo sería posible gracias al sentido de la justicia presente en el alma humana."
"...usted está tratando de alimentar el cerdo por el culo."
C.M.

El corazón es un cazador solitario (1.936-37), primera novela de la escritora norteamericana Carson McCullers. Novela bien escrita, con pleno dominio de los temas que quería tratar. Varios, entre ellos, la exclusión racial al sur de los Estados Unidos. La pobreza. Las irracionalidades del capitalismo contra las bondades del socialismo y, tema inevitablemente recurrente, el tema del amor.

Dentro de los protagonistas destacan Mick Kelly, una joven de 12 ó 13 años, perteneciente a una familia blanca y pobre. Mick es una muchacha rebelde, prácticamente encargada del cuido de sus dos hermanos menores, Ralph y Bubber (George); amante de la música clásica (Mozart y Beethoven) y con aspiraciones de tener un violín, un piano. "...La música era ella...y era su verdadero yo."  "Más adelante, cuando tuviera veinte años, sería una compositora famosa en el mundo entero. Tendría su propia orquesta sinfónica..."                                                                                                                                      

También estaba Jhon Singer un sordomudo que vivía con otro sordomudo griego llamado Spiro Antonapoulos. Tenían diez años viviendo juntos hasta que Antonapoulos es internado, a solicitud de un familiar, en un asilo fuera del pueblo donde habitaban. Singer se opone con todas sus fuerzas pero al final no puede cambiar la situación, no obstante, Singer nunca olvidaba a Antonapulos, lo visitaba, le llevaba regalos que casi siempre éste recibía con indiferencia. Singer, después de la ida de su compañero alquila una habitación en la casa donde vivía Mick. Singer era un hombre muy apreciado, considerado, amable y llegó ha convertirse en un hombre vital para Mick y otros personajes.                                                                        
Por otra parte, Biff Brannon, dueño del  Café Nueva York. Estaba casado con Alice. Mantenían el café abierto las 24 horas del día. Biff era un buen hombre, muy observador y tenía especial consideración con personas que tuvieran algún defecto físico, brindándoles siempre un trago. Alice muere posterior a una operación de emergencia (tenía un gran tumor abdominal) y Biff retoma su vida de una manera que nos hace pensar que, en realidad, no era feliz con Alice. Más adelante nos damos cuenta que Biff se siente atraído por Mick pero ello no pasó de allí. Biff también apreciaba mucho a Singer aunque siempre le pareció que tenía algo extraño que él no llegaba a precisar.                                                                                                 
Otro personaje a destacar es Jake Blount, un hombre blanco, muy aficionado a la bebida, inteligente, lector. Jake, cuando llega al pueblo donde transcurre la novela, se pasa casi dos semanas metido en el Café Nueva York, bebiendo y hablando sin parar. Biff le había fiado todo ese tiempo. A Biff le llamaba mucho la atención Jake, consideraba que era un hombre singular. Biff nunca llegó a desentrañar quién era Jake. Jake era socialista y no perdía tiempo para exponer sus ideas a quien quisiera escucharlo o no sobre las injusticias y la burda explotación capitalista. Al final de la novela Jake se va del pueblo, creyendo haber matado a un joven negro en una pelea en el parque de diversiones donde trabajaba.                                                             

Otro importante personaje, el Dr. Copeland, médico negro, abnegado hasta más no poder con sus pacientes. El Dr. Copeland vivía sólo. Su esposa había muerto muchos años atrás y sus hijos se habían marchado por diversas razones. Su única hija hembra se llamaba Portia y trabajaba como sirvienta en casa de los Kelly. El Dr. Copeland vivía obsesionado por el tema de los negros pero lo que menos toleraba era la propia actitud de los negros hacia sus opresores. Decía: "...-la raza negra sube a la cruz y es crucificada todos los viernes por impulso propio..." Portia era una excelente muchacha, estaba casada y con ellos vivía su hermano menor Williams que era un joven de carácter tranquilo, tocaba la armónica pero circunstancias de la vida que para nada dejaban de lado el hecho que fuera negro, hicieron que Willie fuera preso y allí, por una situación de maltrato brutal tuvo que sufrir la amputación de sus dos piernas. Bajo esta situación fue que lo dejaron libre con la condición de que no hiciera ningún reclamo sobre lo que había sido una agresión por parte de los guardias de la prisión. Portia visitaba asiduamente a su padre y trató que sus hermanos se reconciliasen con él. El Dr. Copeland tenía tuberculosis pulmonar. Era comunista y la situación de los negros lo hacia experimentar una furia permanente contra los blancos. Jhon Singer fue la excepción. Como dije antes, Singer se convierte en el centro de atención de varias personas. Estas personas se sentían escuchadas y respetadas por él aunque después queda claro que Singer no comprendía la mayor parte de las cosas que le comentaban. Mick, quien estaba en la escuela, tuvo que dejarla para ponerse a trabajar (se sentía muy mal por ello). Su amor por la música quedó en un plano secundario. Desarrolló un amor platónico por Singer. El Dr. Copleland y Jake, lo visitaban con frecuencia y lo consideraban un auténtico amigo. Al final, en una ocasión en que Singer va a visitar a Antonapoulus, se entera que éste había fallecido. Resulta claro que Singer estaba muy enamorado de Antonapoulus, tanto así que no llega a resistir su muerte y se suicida.

¡Respetable novela!

Carson McCullers nació en Columbia, Georgia en 1.917 y murió en Nueva York en 1.967. Tuvo una vida difícil. Los últimos diez años de su vida los pasó inmovilizada por una parálisis progresiva.

Caracas, 29 de junio de 2011.

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